No es la primera vez que se desploman losas de la fachada del edificio de sor Valentina Mirón donde está situada la jefatura de Tráfico de la Guardia Civil, pero ayer fue parte de la cornisa la que cayó en bloque a la calle donde, por suerte, no pasaba nadie aunque sí dañó a tres de los coches que estaban aparcados. Sucedió hacia las diez de la mañana y hasta hora y media después no acabaron los bomberos de retirar cascotes con la colaboración de la policía local.

"Imagínese el susto al oír el ruido". La vecina añadió que la comunidad de vecinos lleva tiempo insistiendo a la constructora para que repare estos desperfectos y ayer cundió la alarma. "Hay otras zonas con las losas desprendidas y debajo juegan niños todos los días". Salvo para los dueños de los coches, todo quedó ayer en un susto que confían en que no se repita.