Los comercios de la calle del Sol sólo abrirán al público por la mañana desde hoy mismo porque de tres de la tarde a doce de la noche se cerrará el paso a los peatones para que la empresa constructora pueda trabajar con mayor seguridad para sus propios empleados y los viandantes y se agilicen las obras de pavimentación recién empezadas.

Así lo han aceptado de buen grado los comerciantes a propuesta del ayuntamiento, al que la empresa había advertido de los riesgos de seguir abriendo zanjas y trabajando en una vía pública que seguía abierta a la circulación de peatones. Estos tendrán que desviarse por las calles San Pedro y Arcediano por las tardes y si desean hacer compras en la calle del Sol tendrán que hacerlas por las mañanas.

La asociación de comerciantes de la calle del Sol y el concejal de Tráfico, Paco Corisco, se lo comunicaron anoche a los afectados que, en su mayoría, lo han aceptado como la mejor manera de garantizar la seguridad de unos y otros y aligerar unas obras que tienen ya levantada la mitad de la calle y que pronto llegará hasta la llamada plaza de quemada.

A DESTAJO POR LA TARDE

Si bien es cierto que algunos comerciantes se mostraron contrarios y habían pedido que las obras de pavimentación se realizaran de noche con el rechazo más absoluto de los vecinos. Las máquinas empezaron la semana pasada a levantar el pavimento y tanto la empresa como los técnicos municipales habían mostrado su preocupación al ayuntamiento por motivos de seguridad en el trabajo, por lo que el concejal decidió pedir ayer la colaboración de la asociación de comerciantes, que decidió proponer a sus asociados un horario exclusivo de mañana en tanto en cuanto duren las obras.

Algunos comerciantes consultados reconocieron que con la calle levantada y más aún convertida en un barrizal a consecuencia de las lluvias, era un auténtico peligro. "Ayer --explicaba uno-- la presión hizo que una manguera empezara a moverse sin control y fíjate si le da un porrazo a alguno con lo que pesan".