Algo trama José Luis Díaz. Se le nota en la cara. Por carambolas de la vida política, el exalcalde que llevó al juzgado al mismísimo PP porque le defenestró después de ganar dos elecciones, ocupa ahora en el Parlamento extremeño la vacante del mismísimo Carlos Floriano en su marcha a Madrid. Pero para quien la cara no sea el espejo del alma, su discurso no deja dudas. Reivindica un relevo en el PP extremeño y que las nuevas caras visibles sean de los que ganan en las urnas. O sea, él, por ejemplo. Aviso a navegantes de un político que no tiene pelos en la lengua y que, por lo que se ve, vuelve con fuerza a dar la batalla interna en el momento de mayor debilidad del PP. Floriano y compañía se van a acordar del día en que le dejaron volver al redil, y por la puerta grande. Hasta Félix Dillana le ha dado un consejo, que defienda sus cosas, pero con tranquilidad. Fue el día en que ambos ejercieron de cicerones para los estudiantes de Plasencia en la exposición de los 25 años de Estatuto. ¡Qué foto! Como la del ex lider del CCPL, que partió el PP placentino, jurando su cargo de diputado del PP por Cáceres. Qué cosas...