La acogida de inmigrantes llegados en pateras no es nueva en Plasencia. Cáritas recibe desde marzo a subsaharianos en su centro de acogida temporal, en La Data, donde encuentran comida, techo y asistencia médica sin excepciones, y, a cambio, realizan trabajos de utilidad pública como el resto de acogidos.

Así se les puede ver trabajar en la rotonda de los Pitufos y en todas las que la jardinería depende de Cáritas Diocesana, según un convenio firmado con el ayuntamiento. Pero su llegada no es masiva, sino que prácticamente cada mes se van renovando y por este centro han pasado alrededor de cuarenta inmigrantes, según indicó Iván Torres, el responsable del centro de atención temporal.

Por su experiencia, son personas enormemente agradecidas. "Tener un plato caliente y una cama les parece un mundo después de haberse pasado días enteros en un cayuco. Son gente muy agradecida y muy disciplinada", resalta mientras algunos de los acogidos se prueban pantalones y camisas de las que ceden a diario en el ropero de Cáritas. Solo se admite la que llega en buen estado y limpia.

Los extranjeros llegan acompañados por Cruz Roja y no suelen permanecer más de un mes porque aún sin papeles, tienen contactos con compatriotas que les han buscado trabajos en Murcia o Almería, generalmente, según el testimonio que dejan en Cáritas.