Una cena no ha sentado nunca tan bien como la que el viernes se celebró en el hotel Alfonso VIII. Los 40 euros que costaba el cubierto no estaban recompensados solo con el menú sino también con la satisfacción de poder aportar un granito de arena a la lucha contra el sida en los niños. Es lo que hicieron un total de 187 personas que, gracias a su participación, permitieron a la delegación local de Unicef recaudar casi 4.000 euros para su campaña.
El resto hasta llegar a esta cifra lo aportaron otras personas que optaron por no cenar, pero sí aportaron el dinero del cubierto a través del llamado menú 0 , como destacó la presidenta local de Unicef, María Angeles Gómez.
Junto a estos y ciudadanos que abarrotaron uno de los salones del hotel, hubo otros padrinos de excepción, los toreros Juan Mora, Emilio de Justo y Miguel Abellán --que anunció su asistencia en el último momento-- y el ganadero Victorino Martín.
Todos quisieron colaborar donando para una subasta alguno de los elementos que son imprescindibles en su profesión y que han paseado por plazas de toros de todo el país. Así, Emilio de Justo donó un capote, Juan Mora una montera, Talavante, pese a no asistir a la cena, envió otro capote dedicado y Abellán se quitó la corbata allí mismo y la donó desinteresadamente para la causa mientras que Victorino Martín aportó una divisa de su ganadería.
Fue un éxito. María Angeles Gómez quiso agradecer especialmente la colaboración del placentino Juan Mora porque "él ha sido nuestra conexión con el mundo del toreo y el que ha hecho posible que vinieran los demás". Además, destacó el destino de los 4.000 euros recaudados, que irán a parar a la campaña Unidos por la infancia, unidos contra el sida porque "cada día se contagian 1.800 menores de quince años a través de sus madres, sobre todo en el Africa subsahariana y con este dinero se pretende proporcionarles un tratamiento; informar a las madres y a los jóvenes sobre su transmisión y apoyar a los muchos niños huérfanos", subrayó.
