La elaboración del censo de viviendas vacías del recinto intramuros ha comenzado y estará listo en febrero. Dos técnicos empezaron ayer oficialmente a recorrer casa por casa con un cuestionario destinado a averiguar el estado de las viviendas y si están en venta o alquiler con el objetivo final de repoblar la zona centro.

Se pone en marcha así una promesa electoral del PSOE que su promotora, la edil Carmen Blázquez, defendió porque "tenemos el centro un poco olvidado, la gente se va a buscar vivienda a la periferia y lo que queremos es volver a llenar el centro de chiquillos, queremos un centro lleno de vida". Para conseguirlo, el ayuntamiento ha firmado un convenio con la fundación del colegio oficial de aparejadores y arquitectos técnicos de la provincia de Cáceres, que ha contratado a los aparejadores Mari Angeles Llorente y Javier Rama para elaborar el censo.

Costará unos 11.900 euros y, según Blázquez, estará finalizado en tres meses y medio, a finales de enero o principios de febrero como máximo. Pero para poder realizarlo con fiabilidad la concejala considera inestimable la colaboración ciudadana. Así, ayer presentó públicamente a los técnicos que lo harán porque "queremos que les faciliten su labor, que les abran la puerta, e incluso que les atiendan los vecinos de las casas donde no esté su dueño porque será un bien para todos y les vamos a facilitar el futuro de su vivienda".

El censo contará con cartografía y planos de la situación de las viviendas, fotografías interiores y exteriores e incluirá también información sobre el estado de conservación y su disponibilidad, es decir si están o no en venta o alquiler, más los datos del propietario. La concejala quiso aclarar que contestar a estas preguntas "será por supuesto voluntario y a quien no quiera, no le podemos obligar, por eso pedimos su colaboración".

Cuando esté listo, se expondrá al público para facilitar la compra o alquiler de la vivenda y la información se registrará también en una base de datos.