Las obras de edificación del nuevo centro de hortofruticultura ecológica que financiará el Instituto Nacional de Investigación y Tecnología Agraria y Alimentaria (INIA) --dependiente del Ministerio de Educación y Ciencia-- y en las que también colabora la Junta de Extremadura, podrían comenzar a ejecutarse después del verano tras el visto bueno otorgado por el gobierno local en la comisión del pasado lunes.
En concreto, el proyecto contempla la rehabilitación del antiguo edificio de Cetarsa para construir en su interior un centro de investigación en I+D, que tendría unas dimensiones de 1.800 metros, y contará con instalaciones como laboratorios, biblioteca o despachos para los técnicos e investigadores.
Los trabajos empezarán con retraso, puesto que en febrero del 2006 el secretario general del INIA, Francisco Fernández, anunció que el complejo estaría funcionando a finales de este año. Sin embargo, ha habido que modificar el proyecto para contemplar "el ajuste de la alineación del cerramiento de la parcela a la avenida de España" y la adjudicación, otorgada a la empresa Feyju Galicia SL por 1,5 millones de euros, no llegó hasta el pasado mes de mayo.
REFERENTE Cuando esté acabado, el nuevo centro de investigación será un referente nacional, puesto que será el primero en construirse en España. Además, a parte de las obras de construcción, el ministerio prevé invertir otro millón y medio de euros en dotarlo de personal fijo --aún se desconoce cuántos trabajadores se necesitarán-- y mobiliario.
Asimismo, el centro necesitará utilizar varias zonas rústicas en la provincia para instalar los campos de investigación.
