Todo el sistema de saneamiento y depuración de aguas residuales de la ciudad se va a renovar. Lo hará la Confederación Hidrográfica del Tajo y la Junta de Extremadura en virtud de un protocolo de depuración de aguas que firmará la administración regional con el Ministerio de Medio Ambiente, Rural y Marino. Los proyectos se iniciarán el próximo año e incluirán tanto una actuación en la depuradora como un tratamiento integral para encauzar el arroyo Nieblas.

Esta actuación la anunciaron ayer el presidente de la Confederación del Tajo, José María Macías, el consejero de Fomento, José Luis Quintana y la alcaldesa, que junto con el subdelegado del Gobierno en Cáceres, Fernando Solís, acudieron a la ciudad para visitar la segunda fase de adecuación de las riberas del río.

Macías subrayó que "esta es una acción decidida sobre el saneamiento porque Plasencia debe ser ejemplo de depuración de sus aguas y de conservación del río". Por eso, insistió en que hay que dotar a la ciudad "de una depuradora del siglo XXI y de todos los saneamientos adecuados".

El proyecto está en pañales y es ahora cuando hay que redactar los proyectos y realizar los estudios necesarios, como explicó la alcaldesa. Por eso, Macías señaló que no está decidido si será necesario construir una nueva depuradora o bastará con ampliar la actual, aunque se mostró más partidario de lo segundo.

Elia Blanco apuntó que la depuradora actual tiene capacidad para el saneamiento de la ciudad y también para el que pudiera llegar del Valle del Jerte, aunque sí dijo que es necesario ver, de cara al futuro PGOU, "qué terrenos pondríamos a disposición de la CHT si fuera necesario".

Respecto al arroyo Nieblas, hizo hincapié en la importancia de que este proyecto contemple su encauzamiento porque "es un proyecto ambicioso y necesario, que no nos hemos atrevido a realizar antes porque no había suficiencia económica", dijo. Adelantó que se actuará tanto en los vertidos que realizan las empresas como en su adecuación por estar en un medio urbano.