En el plazo máximo de dos meses habrá en las calles hasta diez agentes más de la Policía Nacional, según aseguró ayer el nuevo subdelegado del Gobierno, José Diego Santos, en la visita que realizó a las dependencias de la Comisaría y de la Guardia Civil. El Ministerio del Interior cubrirá así diez de las diecinueve vacantes que arrastra la plantilla --de un total de 41 policías--, si bien cuatro agentes ahora en activo pueden optar este año por pasar a la segunda actividad con lo que serían otras tantas nuevas bajas.

"Aquí hay un déficit de personal como en Cáceres y en toda España porque no ha habido convocatorias --señaló-- pero este año se va a cubrir más del cincuenta por ciento del que había".

NUEVA SEDE EN TRES AÑOS

El nuevo subdelegado vino acompañado del comisario provincial, Ricardo Beltrán, y recorrió la Comisaría junto al jefe, el inspector Pepe Hernández, para anunciar que en el plazo de tres años se trasladará a un nuevo edificio entre el ferial del Berrocal y la avenida de Salamanca sobre un solar cedido por el ayuntamiento. Mientras tanto dijo de las dependencias que "no son una maravilla, pero por lo menos son decentes si bien aquel lugar será más idóneo por accesos e instalaciones modernas".

Así las cosas, felicitó a los agentes por "su magnífica labor y el esfuerzo diario que se ve de forma palpable en el descenso de delitos" que tradujo en una disminución del 16,51% generalizado de faltas y delitos en lo que va de año con respecto al mismo periodo del anterior, si bien el principal caballo de batalla de Comisaría sigue siendo el incremento de robos de coches y domicilios. "Estamos tomando medidas concretas para ello en colaboración también con la Policía Local en el polígono y tras constatar la presencia de bandas organizadas de fuera", según indicó el jefe.