Colaboración en materia de ruidos y de limpieza. Eso es lo que pidió ayer el ayuntamiento a la hostelería con un aviso. "Si algún local tiene quejas reiteradas de vecinos, se le aplicará la sanción correspondiente" según resaltó el concejal de Interior, Francisco Martín, quien, por primera vez en el ayuntamiento, reunió a vecinos de las zonas más afectadas y a los propietarios de pistas de verano y de bares de copas.

En la misma línea, los hosteleros de la plaza Mayor van a ser los primeros en recibir un oficio del ayuntamiento donde se les pide colaboración para mantener limpias las terrazas y el concejal emplazó a los empresarios a impedir que se consuma en la calle. Demandas que Felipe Doncel, el representante de la federación empresarial, se comprometió a trasladar al sector para garantizar su cumplimiento.

Mientras que la federación de asociaciones de vecinos (Fepave) dio ayer un voto de confianza a lo que el concejal llamó pacto de caballeros porque --dijo su presidente, Jaime Collado-- "no somos enemigos de los empresarios" y confió en la rentabilidad del sonómetro recién adquirido por la concejalía de Interior. Otros vecinos invitados, de las calles Vidrieras, Cartas o Patalón entre las más afectadas, pidieron copia de la denuncia, en caso de tener que llamar a la policía local por ruidos, para probar su queja.

El concejal primó ayer el diálogo con compromisos, pero avisó a los gerentes de los locales nocturnos: "En caso de conflicto de intereses, prevalecerá el derecho al descanso". Los vecinos prometen estar vigilantes.