Uno de los concursos más vistosos, musicalmente hablando, del Martes Mayor es el de tamborileros, que este año llegará con dos novedades. Por un lado, servirá de homenaje al tamborilero fallecido en abril Santiago Béjar, primer profesor de flauta y tamboril que creó su propio método de enseñanza. Y por otro, dará la opción a los participantes de interpretar composiciones propias, versiones de temas más modernos y repertorios de otros lugares.

El alcalde destacó en la presentación del programa del Martes Mayor que han sido los propios tamborileros los que han pedido retomar este concurso, que comenzó en torno a los años 80 y se ha desarrollado de forma intermitente, según explica Angel Domínguez, miembro de la comisión asesora del concurso.

Serán también tamborileros los miembros del jurado y, junto a Domínguez, tamborilero y profesor de música, formarán parte de la comisión Pilar Barrios, catedrática de música de la Uex, y Marta Serrano, músico y conocedora de la tradición.

Unos y otros tendrán que valorar las interpretaciones de los concursantes, que deberán interpretar una pieza obligatoria perteneciente al repertorio tradicional extremeño de flauta y tamboril: La charrá del Casar de Palomero . Es la que servirá de homenaje al fallecido Santiago Béjar, de hecho, se encuentra en su CD Sones extremeños de gaita y tamboril .

"Se ha elegido como homenaje y también para recuperar piezas que no se suelen tocar casi nunca, como el repertorio de García Matos, que ya no se toca", señalaba ayer Domínguez.

Pero además y como novedad que destacó ayer Pilar Barrios, los participantes deberán tocar una segunda tocata de libre elección, que podrá ser una pieza popular o tradicional representativa de su lugar de procedencia, o bien de nuevos repertorios y tendencias, o bien de improvisación, creación o composición propia. Es decir, "vamos a tener una visión más amplia de las posibilidades de la flauta y el tamboril; vamos a ver la creatividad de los participantes, que pueden improvisar u ofrecer versiones de temas más modernos y de actualidad. A ver qué nos presentan", se preguntaba ayer Barrios.

Ambos resaltaron que se valorará el virtuosismo de los intérpretes, la "calidad artística de la interpretación", más fácil de comparar a la hora de interpretar la pieza obligatoria.

Domínguez espera que participen los buenos intérpretes de las comarcas. "Hay unos 12 o 15 de 20 a 40 años que tienen buen nivel técnico". Respecto a los que siguen destaca que se mantienen sobre todo en Las Hurdes, seguido del Alagón.