El constructor de la urbanización de San Calixto sigue en busca y captura por el juzgado tras la denuncia por vicios ocultos que le han puesto diez comunidades de vecinos mientras siguen produciéndose desprendimientos de losetas a la calle con el evidente peligro para los viandantes y la indefensión que esto crea en los deueños de las viviendas. La situación es rocambolesca: el juzgado no ha podido notificar la demanda civil que han interpuesto contra él sencillamente porque está en paradero desconocido. Lo único en obras son las aceras de la calle que baja al centro de salud.