La policía local detuvo, en la madrugada del miércoles, a cuatro jóvenes, uno de ellos menor de edad, por destrozar una máquina de refrescos en la avenida Virgen del Puerto.
Según la policía, usaron una tapa metálica destinada a cerrar las bocas de agua. Tres de los autores fueron localizados escondidos entre coches aparcados en el hospital y el cuarto, más tarde, también por la zona. Se les trasladó a comisaría.
El concejal de Interior, Francisco Martín, ha aprovechado para hacer un llamamiento a los padres "para que ejerzan su autoridad sobre los menores, puesto que son responsables de sus actos" y ha invitado a la reflexión sobre la hora a la que los menores deben estar en la calle, ya que en este caso, eran las 2.45 de la madrugada.
