"Quien tiene el problema es el ayuntamiento porque está prestando un servicio municipal. Además, escombreras hay en todos los pueblos de Extremadura y trasladar el problema a los industriales es negar la mayor". Así replicó ayer el presidente de la federación de la construcción, José Ramón Suárez, al edil López Bueno.

No obstante, se mostró abierto a buscar una solución conjunta porque "es un problema que hay que resolver entre todas las partes y nos prestamos a resolverlo". Eso sí apuntó que el mayor problema puede ser que el empresario quiera cobrar una tasa abusiva para trasladar así los costes de cumplir los requisitos legales.