La salud medioambiental de Plasencia es "muy desfavorable", según el informe que ha desarrollado la Secretaría General de Turismo, bajo el Proyecto de Municipio Turístico Sostenible. El principal problema que se desprende de este documento, según confirmó ayer el alcalde en funciones, Juan Antonio Alvarez, es que pese a que el ayuntamiento ha realizado diferentes actuaciones que han impulsado la mejora de dichas condiciones; no existe una labor general de planificación, organización y difusión de los resultados, Esto ha provocado que la contaminación sea desorbitada y que la ciudad "no pueda formar parte del proyecto", señala el edil.

EMPRESAS SIN LICENCIA

Además, según los datos aportados por los servicios técnicos municipales, en Plasencia existen aproximadamente 275 empresas ubicadas que carecen de licencia, y hay algunas a las que se les ha retirado por sobrepasar el límite de ruido establecido.

Del estudio se desprende que en materia de ruido, los establecimientos de diversión son la principal fuente contaminante, especialmente discotecas y bares que sólamente reducen el volumen de ruido en caso de quejas o denuncias, puesto que no existe un programa o plan de documentado para mejorar el nivel de decibelios en el municipio.

Asimismo, en cuanto a la calidad del aire, se expone que la contaminación atmosférica en la ciudad se debe fundamentalmente a la gran afluencia de vehículos, puesto que no existe ningún censo de actividades que desvele otros agentes contaminantes.

En este caso, los malos olores tienen mucho que ver con la recogida de basura y con la ubicación de los contenedores. En este sentido, las fuentes de contaminación son mucho más acusadas en verano y en primavera que en otoño e invierno. Además, según el informe refrendado por Alvarez, no se ha realizado ningún control de emisiones de malos olores ni existe un registro de emisiones contaminantes.

A la vista de los datos revelados, Alvarez aseguró que el equipo de gobierno dará los primeros pasos en esta materia elaborando un plan de estudio y de control de actividades como el recogido de basura o el barrido de las calles, al mismo tiempo que advirtió que el PSOE ya había denunciado este asunto.