El pasado miércoles quedó extinguido el contrato entre el ayuntamiento y la empresa que ha estado haciéndose cargo de la gestión del matadero desde el año 2001. Esa fue la fecha tope que dio la junta de gobierno para que la empresa dejara libres las instalaciones y elementos de la concesión, que pasan al ayuntamiento.

El gobierno municipal ha confirmado su decisión y requerido a los técnicos que examinen las instalaciones para comprobar "que han sido objeto de reversión, en su totalidad, y en adecuado estado de uso, concretando y valorando en su caso los desperfectos existentes", según indica un informe técnico. No obstante, la empresa todavía debe al ayuntamiento 66.091,36 euros del canon anual impagado desde el 2001 al 2014 inclusive.