Los concejales Miguel Antonio García Pintor y Pilar Sánchez presentan en el Registro del Ayuntamiento de Plasencia su renuncia como miembros del Grupo Municipal Popular y pasan a formar parte del grupo no adscrito.

Según la agencia Efe, los dos ediles habían sido apartados del Grupo Popular y suspendidos temporalmente de militancia desde el pasado mes de mayo tras romper la disciplina de voto al apoyar la propuesta presentada por el Grupo Socialista en relación a la elección de representantes del Ayuntamiento de Plasencia en la Asamblea de la entidad Caja de Extremadura.

García Pintor detalla que ayer por la tarde ambos ediles fueron convocados a una reunión de grupo en la que se aprobó, por cinco votos a favor y dos en contra, su expulsión de las comisiones informativas.

El ex edil popular llama la atención ante el hecho de que a la reunión no comparecieron tres de los miembros del Grupo Popular por lo que a su juicio esta votación no resulta significativa.

De igual forma, manifiesta que su decisión de abandonar el Grupo Popular se debe a un "tremendo hartazgo de que se nos trate como apestados" y a que no están de acuerdo con el "juicio sumarísimo al que nos han sometido por el simple hecho de defender la autonomía del PP local con respecto al resto de órganos del partido".

Para García Pintor, la raíz de la crisis en el seno del Grupo Popular radica en una "verdadera caza de brujas" contra su persona, motivada porque "siempre he defendido que el PP de Plasencia necesita autonomía y que son los miembros del partido a nivel local quienes deben elegir a sus representantes".

El concejal arremete contra el presidente del PP de Cáceres, Laureano León, a quien acusa de haber "destrozado" al PP de Plasencia.

En cuanto a la nueva etapa como concejales del grupo no adscrito, Miguel García Pintor adelanta que tanto él como Pilar Sánchez trabajarán "para conseguir el progreso de Plasencia" y que lo harán "sin mordazas y sin chantajear a nadie".