¿Por qué se denunció la madrugada del domingo a los locales de copas que siguieron trabajando con el horario antiguo? La respuesta de la edil de Interior, Sonia Grande, fue ayer clara: «la policía tiene que hacer su trabajo, tiene que hacer cumplir la ley».

Ayer se mantenía la indignación entre los hosteleros de bares especiales y discotecas denunciados, ocho según los hosteleros, entre cinco y seis según la edil. Pero Grande recordó «lo que me ha señalado la policía, que en octubre pueden trabajar una hora más».

Nunca se había sido tan estricto, denunciaron los hosteleros, a lo que la concejala replicó que cada año se actúa en función de las circunstancias, porque existe «un vacío legal» y, en esta ocasión, «en los últimos meses ha habido quejas y hay que atender al ciudadano, tenemos que velar por el bienestar de los vecinos y no podemos saltarnos la ley».

Recordó además a los hosteleros que el ayuntamiento «ha tramitado todas las ampliaciones horarias que nos han pedido» y dijo entender sus dificultades para trabajar por el cambio de costumbre de los jóvenes y por una legislación que no comparte, ya que «provoca más ruido en la calle y no regula situaciones como el cambio de horario y los tiempos para limpiar y hacer caja, por ejemplo». Por lo tanto, calificó la situación de «injusta y difícil», pero insistió en que «es la legislación que tenemos».