Unas 25 personas de la promoción 1977-1980 de enfermeros se reunió ayer en la ciudad para celebrar las bodas de plata. Algunos llegaron desde zonas de la región como Don Benito, Llerena, Navalmoral o Coria y otros incluso desde Madrid o Alicante.

Rocío Serrano, promotora del encuentro, destacó que "hay gente que no se ve desde hace veinte años" y resaltó el hecho de que ellos formaron parte de la primera promoción mixta de la antigua Escuela de Enfermería de la diputación provincial. Así, ayer hubo incluso más hombres que mujeres, que disfrutaron de un almuerzo, la entrega de insignias de la organización colegial y sobre todo, refrescaron recuerdos: "En nuestra promoción había muy buen rollo. No tuvimos orla porque los hombres se jugaron el dinero a las cartas así que ahora tendremos foto de familia", subrayó.