MIRALVALLE se alarmó la madrugada del lunes cuando oyó llegar a los bomberos y a la policía local a la calle Lope Vaez Herrero, donde se había caído parte de la cornisa de un edificio hiriendo, por suerte, levemente a una mujer en el hombro. Peor parte se llevó el coche aparcado al que fueron a caer los cascotes.