La ciudad podría tener un centro de acogida de mujeres maltratadas en tres años. Esa es la proposición que realizó ayer la concejala de Igualdad y Seguridad Ciudadana, Josefa Pérez, a la directora general del Instituto de la Mujer en Extremadura, María José Caraballo y que ahora deberá estudiar la Junta de Extremadura.
El proyecto municipal pretende crear una casa de acogida y tratamiento a mujeres que hayan sido víctimas de la violencia domésticas. Según la edil, el centro tendría cabida para una decena de mujeres y sus hijos, tendría una sección para el tratamiento de las madres y otra de carácter infantil y estaría situado en Plasencia.
Actualmente, las víctimas de los malos tratos son atendidas por agentes de la policía local y asistentes sociales especializados. En la provincia sólo existe el centro de acogida de Cáceres y Josefa Pérez afirma que hay que acabar con esta situación de desamparo: "el tratamiento psicológico en Plasencia se hace en la sede de IU, porque no disponen de otro lugar".
