Miralvalle es ahora mismo un hervidero de protestas. La indignación es el sentimiento general entre vecinos e industriales después de los tres cortes de agua que han sufrido en sólo ocho días y en cada bar, peluquería o tienda no cesan las críticas contra la empresa.

Además de los trastornos que han provocado en los domicilios, los más afectados han sido bares y peluquerías, por las pérdidas que les han ocasionado los cortes al producirse desde aproximadamente las nueve de la mañana hasta casi el mediodía. Según explicaron ayer, la primera avería se produjo el lunes 15 en la calle San Fulgencio y se volvió a reproducir una semana más tarde, mientras que ayer, la empresa tuvo que reparar otra en la calle Lope Váez Herrero.

Así, un bar como el Siglo XXI tomó incluso la determinación de cerrar porque la falta de agua impide utilizar la cafetera, el lavavajillas y afecta también a la actividad de la cocina. Otros dejaron de servir cafés y las peluquerías recurrieron a cubos o garrafas, aunque muchas se vieron obligadas a pedir a las clientas que volvieran por la tarde u otro día: "Sin agua no se puede trabajar y no hemos tenido más remedio que lavar con agua fría".

NO ES ZONA PRIORITARIA Unos y otros se han quejado de que se hayan producido dos averías en una semana en la misma zona: "Si lo arreglan, que lo hagan bien a la primera y no nos hagan perder dinero dos días", pero sobre todo, critican que la empresa no avise con antelación de los cortes: "Han tenido tiempo porque ha estado saliendo a borbotones varios días y así podríamos haber estado prevenidos".

Por su parte, la empresa del agua reconoció ayer que los cortes han sido muy seguidos, pero lo achacó a una situación "circunstancial" y, aunque el origen ha sido en ambos casos la antigüedad de las tuberías, advirtió de que "no son las más viejas y hay otras zonas prioritarias". Sobre la posibilidad de avisar con antelación aseguró que "normalmente se avisa, pero en este caso es complicado porque el barrio es muy grande y no se puede ir casa por casa". Además, advirtió: "No podemos actuar si no tenemos constancia de la avería, en cuanto la policía nos avisa, las arreglamos".