Todavía no se han construido las viviendas, pero el PIR de La Data ya está urbanizado y los ladrones aprovecharon el Jueves Santo para llevarse también los cables del alumbrado público. El dato lo confirmó ayer el ayuntamiento, aunque aún no ha hecho el recuento de la cantidad desaparecida, pero llama la atención sobre el hecho de que se trata de una urbanización aún no recepcionada por lo que esta vez los daños los pagarán los constructores. En cualquier caso, es un negocio ilegal que se sostiene porque alguien compra el material robado, que es por donde los afectados esperan que actúen la policía, vista la impunidad de los cacos.