Hércules, Zeus, Poseidón, Atenea, Ulises, Perseo. De todos ellos y muchos más han aprendido su historia y su legado los niños y niñas que ayer finalizaron el taller de teatro grecolatino que se ha impartido en la Casa de la Juventud como actividad paralela al Festival Romano de Mérida. Juegos, música y diversión han sido la tónica de estos cinco días de actividad.

Se han trabajado nociones básicas del teatro y del actor con el objetivo de «acercar a los niños y mayores este arte y en concreto el mundo grecolatino», señalaba Miguel Pérez, el responsable de Chameleon Producciones, que se ha encargado de los grupos. Todo ha sido a través del juego y la música, de una forma lúdica «para terminar conociendo la historia de los dioses griegos, pues a los más pequeños les encanta conocer que había un dios del fuego o del mar, por ejemplo».

Durante estos cinco días los pequeños no han parado de hacer teatro, pero también actividades relacionadas con las manualidades o la pintura, «pero siempre con el enfoque del teatro grecolatino». Y siempre, al final de cada día, se prepararon una escena de un coro griego que representaron ayer como muestra de lo aprendido. «Los primeros días les costó, pero al final se han soltado y creo que hay buen futuro para el teatro en estos chicos», aseveraba Miguel.

Por la tarde, los adultos

Por las tardes era el turno del grupo de los adultos «con los que se ha podido profundizar más en el teatro y todo lo que conlleva, como el manejo de las emociones, pero siempre también desde el juego y la diversión», comentaba el responsable de Chameleon.

Niños y niñas han terminado «encantados» de poder acercarse al teatro de esta manera «y de hacer muchos amigos».

Lo que más les ha gustado han sido «los tiempos de interpretación cuando Miguel nos daba los papeles para el final de la clase y también los momentos de bailar», según señalaban los pequeños.