Agentes de la Policía Local detectaron el jueves a mediodía al presunto cabecilla de un grupo de ladrones de coches cuando se paseaba por el barrio del Pilar al volante de una furgoneta Renault. Emprendieron una persecución que les llevó hasta la avenida Donantes de Sangre en la Data a gran velocidad porque el sospechoso es un auténtico fitipaldi . Allí, otro coche policial esperaba para cortarle el paso, pero finalmente optó por dejarle pasar para preservar la integridad de la mujer y su hijo de corta edad que le acompañaban en la furgoneta.

Existe el precedente del coche de la Policía Nacional que embistieron en su huida la semana pasada tras robar en el estanco del Rosal de Ayala. Así el presunto ladrón decidió abandonar el coche y a su familia en las cercanías del barrio de Gabriel y Galán y huyó a pie. La mujer y el bebé volvieron a casa, el vehículo fue llevado al depósito municipal y él sigue desaparecido.

Mientras tanto, la Policía Local ha recuperado el BMW robado en Cañada Real y que utilizaron para robar el citado estanco y otro minutos antes el mismo día en Tejeda de Tiétar. Al parecer los ladrones lo dejaron abandonado en las proximidades de los minicines aunque lo acababan de utilizar para robar otro estanco en Coria.