La brigada de medioambiente estuvo ayer muy pendiente de las riberas del río que se anegaron el sábado por el desembalse de la presa. El concejal de Medio Ambiente, Juan Carlos Herrero, restó ayer importancia a la crecida porque "son paseos de ribera y, por tanto, inundables y es lógico que pase". Herrero considera que "no se produjo una situación de alarma" que hubiera hecho necesario avisar del desembalse, aunque la decisión sería de la CHT.