Las lluvias han vuelto a aislar a las empresas del polígono industrial con entrada por el camino viejo de Serradilla. El mismo día que se inundó buena parte de los Pitufos, el agua volvió a llegar hasta las naves porque el camino no tiene un sistema de desagüe y cada año se repite la imagen de algunos trabajadores llegando en barca a Fatela.

Pero son varias las empresas afectadas y el malestar es creciente. El asfaltado que realizó el ayuntamiento poco antes de las elecciones de mayo no ha dado resultado y ahora esperan mayor sensibilidad por parte del nuevo gobierno del PSOE para que contemple una solución en los próximos presupuestos. El estado en general del polígono es una queja constante de la Federación Empresarial Placentina, que hasta ahora no ha visto realizada ninguna de las mejoras prometidas por las distintas corporaciones.

Los desagües deficientes, los accesos peligrosos o la maleza acumulada son algunas de las quejas acumuladas por los empresarios en todo el polígono, cuyos representantes no han mantenido todavía ningún encuentro oficial con la alcaldesa .