Olor, color, arte, música, baile y tradición. Todo un compendio que hicieron del Martes Mayor 2017 una jornada de alegría y homenaje en la ciudad para la población de Montehermoso y sus habitantes y para Joaquín Sorolla, el pintor valenciano que retrató a su gente y reflejó la vida del mercado tradicional de la capital del Jerte hace ya 100 años.
Desde las ocho de la mañana se notaba ese ambiente festivo en el centro de la ciudad con el mercado de frutas y verduras y en el que numerosos puestos concursaban por llevarse varios premios. Y una hora después comenzaban también los concursos de artesanía y el de tamborileros, como ya es tradición en este día de Martes Mayor. Durante esas horas de concurso, amenizaban el recorrido los grupos folklóricos extremeños de Sol Salir, de Plasencia; La Serrana, de Piornal; Virgen de Tebas, de Casas de Millán; y Sabor Añejo, de Montehermoso.
Numeroso público se encontraba en la plaza Mayor y en las calles aledañas, de la ciudad y de los pueblos de las comarcas del Norte de Extremadura, lo que hizo de este día grande, una jornada para disfrutar de las tradiciones extremeñas, al igual que durante el Lunes Menor. La afluencia de personas fue muy similar a la de otros años y en este la meteorología también acompañó. Así lo comentaba Gloria López, de la empresa Siloz y que tenía un puesto de venta de camisetas en la plaza de Santo Domingo. “Ha sido un buen Lunes Menor y Martes Mayor, como todos los años, desde hace cuatro que llevo viniendo”, explicaba. O el Tio Picho, quien acude todos los años a este mercado tradicional. “Son muchos años ya viniendo y la gente siempre responde muy bien, así que estamos contentos”, explicaba.
Gorro
La fiesta del mercado tradicional, arraigada a la ciudad desde su fundación, no deja a nadie indiferente. Y buen ejemplo de ello es el pintor valenciano, Joaquín Sorolla, quien con su obra El Mercado quiso destacar esta tradición tan típica en la capital del Jerte y cómo los ciudadanos de alrededor venían ataviados con sus trajes típicos, como es el caso de las montehermoseñas. Fue hace 100 años, y de ahí su conmemoración, y es ahora cuando se quiere que ese gorro típico sea reconocido por las autoridades. A ello se comprometió ayer la Presidenta de la Asamblea de Extremadura, Blanca Martín, quien prometió que se pedirá la Medalla de Oro en 2018 “porque es una seña de identidad que debemos hacer perdurar en el tiempo, ya que es parte imprescindible de nuestro tejido cultural como región”, señalaba. Se unirán así al impulso de la Diputación Provincial y cincuenta ayuntamientos.
Para finalizar este Martes Mayor, el acto institucional congregó en el Salón de Plenos del Ayuntamiento a numerosas autoridades como el director general de Turismo, Francisco Martín, o el diputado provincial de Turismo, Fernando J. Grande, familiares descendientes de los protagonistas del cuadro de Sorolla, la bisnieta del artista y al grupo extremeño folklórico Sabor Añejo de Montehermoso. Se descubrió una réplica del cuadro del valenciano realizado por la pintoria placentina, Puerto Encinas, y que se podrá observar en el Salón Noble. El alcalde de Plasencia, Fernado Pizarro, dio las gracias a todos los asistentes y en especial a Joaquín Sorolla y su obra porque “es un cuadro que nos hace a todos universales, a la ciudad, a los pueblos y a las comarcas, que son difíciles de dividir”, apuntaba.
También fueron todo un éxito los conciertos de Soraya Arnelas y del grupo OBK.
