El autobús "tiene que ir cosiendo la ciudad y eso es irrenunciable, hay que dar ese servicio público". Lo dice el concejal de Movilidad, Francisco Martín, que quiere que el autobús urbano llegue tanto a los nuevos pisos de 60.000 euros de Los Monges, como piden los vecinos, como a urbanizaciones del norte como Ciudad Jardín y Valcorchero.

"Nos gustaría ver qué servicio se puede dar; con qué horario y frecuencia y cuándo se puede dar", explicó el concejal en alusión a las nuevas zonas. Lo que ya está estudiando es el paso del autobús por Los Monges, un servicio que demandan los vecinos que viven en la zona desde diciembre, a los que ya se han sumado otras dos fases, con lo que en total suman 170 vecinos.

Una vez reunido con representantes vecinales y de la cooperativa que gestiona el autobús urbano, Martín dijo tener claro que "hay que dar servicio municipal al PIR", pero ha rechazado la propuesta de la empresa de suprimir a cambio las paradas de la línea 3 situadas en Sor Valentina Mirón e Higuerillas.

"No se puede vestir a un santo para desvestir a otro", dijo, de ahí que haya planteado a la empresa que sea la línea 2 la que pase por el PIR desviándose por la rotonda de las cigüeñas, aunque no hay nada decidido.

El problema de ampliar el servicio de autobús a nuevas zonas es, según Martín, que "esta es una ciudad muy grande y dispersa y que no recibimos ni un euro al año para mantener el servicio porque al no llegar a 50.000 habitantes, no estamos obligado a darlo", explicó.