El equipo de gobierno del PSOE no va a dar marcha atrás en su proyecto de cerrar el centro al tráfico con los nuevos pivotes magnéticos. Su portavoz, Pablo Sánchez del Mazo, advirtió ayer de que la decisión "está tomada y es firme" en respuesta a las protestas de un buen número de hosteleros de la plaza Mayor y de la asociación de comerciantes de la plaza de abastos, que ha convocado incluso una manifestación para el próximo día 27.

Por contra y según informó Efe, Del Mazo, afirmó que su propuesta de peatonalizar el centro es "mayoritariamente aceptado" y considera que el gobierno local "ha sido valiente al poner en marcha un proyecto que el anterior gobierno no se atrevió a ejecutar para hacer del centro histórico de Plasencia un lugar mucho más habitable".

Sin embargo, la medida ha chocado con la oposición frontal de la plaza de abastos, que pide mantener dos calles de entrada y dos de salida, y con hosteleros de la plaza por el estricto control del aparcamiento en esta zona.

Por otro lado, Sánchez Del Mazo adelantó algunos de los requisitos aprobados para la concesión de las tarjetas que abrirán los nuevos pivotes. Así, dijo que se concederá una tarjeta por vehículo dado de alta en aparcamiento con vado permanente en la zona afectada, taxistas y vehículos industriales con garajes con vados permanentes. Además, se creará una base de datos para coches de residentes con tarjeta de zona azul y vehículos de emergencia.