La asociación de vecinos del barrio de Miralvalle está harta de los cortes de luz que vienen repitiéndose de forma intermitente desde hace más de un año. Cansados de las explicaciones de Iberdrola, el presidente vecinal, Agustín Benavente, ha advertido de que están dispuestos a recoger firmas "o a tomar las medidas que consideremos oportunas" para exigir una solución.

Ya el verano pasado se quejaron a la compañía y al ayuntamiento por la sucesión de cortes a lo largo de varias semanas que después pararon durante un tiempo, pero volvieron meses después y así ha venido sucediendo desde entonces hasta la semana pasada. En este último caso, la corriente eléctrica se vio interrumpida varias veces durante varios días seguidos y el sábado, tuvieron lugar los últimos dos cortes, entre las once y la una de la madrugada.

Estos afectaron también a la avenida Cañada Real y a la urbanización Fuente La Serrana, en la zona norte de la ciudad.

Benavente recuerda que no son cortes de larga duración, pero aún así "hay mucha gente a la que se le han estropeado electrodomésticos". Además, cuando se producen de madrugada son muy molestos, ya que "saltan algunas alarmas de comercios y se tiran hasta cinco minutos sonando y así es imposible dormir", se queja una vecina.

Por eso y dado que se acerca el verano, en que los residentes duermen con las ventanas abiertas por el calor, la asociación de vecinos ha decidido tomar medidas; dado además que las explicaciones de Iberdrola no le convencen. Esta achaca los cortes a las cigüeñas y a una línea privada de Malpartida de Plasencia que, según dice, está en muy malas condiciones y llena de nidos.

Sea como fuere, los vecinos reclaman una solución urgente para no tener que pasar un verano más con cortes diarios.