Todos los mensajes y comentarios ayer sobre Cándido Cabrera, alcalde del PSOE desde 1989 hasta 1995 y fallecido el miércoles a los 81 años, eran de cariño y destacaban sobre todo lo buena persona que fue. Por eso no es de extrañar que ayer su despedida fuera multitudinaria. Tanto en el funeral, oficiado en la catedral y presidido por el obispo, como en la capilla ardiente instalada en el salón de plenos del ayuntamiento que un día presidió. Es la primera vez que este salón se utiliza para este fin.
En torno a las 23.30 horas del miércoles llegaba el féretro al consistorio. Las banderas ya ondeaban a media asta en señal de duelo. El ayuntamiento ha decretado tres días de luto oficial. El ataúd se cubrió con la bandera de Plasencia y, sobre él, el bastón de mando y la medalla de la alcaldía. Las depositó el alcalde, Fernando Pizarro, ayudado por el concejal de Cultura, Angel Custodio, mientras policías locales vestidos de gala escoltaban el féretro y las banderas lucían crespones negros.
Durante toda la mañana de ayer, miembros de la policía local se turnaron para mantener la escolta de gala. Una cruz, velas y coronas de flores a sus pies. De su familia --deja viuda, un hijo y una nieta--, del ayuntamiento, del laboratorio del hospital, de la banda de música Ciudad de Plasencia, que Cabrera promovió, del PSOE de Plasencia... y un gran cuadro de la Virgen del Puerto, cofradía que presidió.
En el salón de plenos, su viuda recibió ayer el pésame de numerosas personas y colectivos como Placeat, Cáritas, la Cofradía de la Virgen... Todos los presidió. También pasaron para despedirse políticos de uno y otro signo y trabajadores municipales actuales y ya jubilados que coincidieron en su mandato. Ante su viuda había una mesa con una esquela que reflejaba que fue además Caballero de la Orden del Monasterio de Yuste y caballero de Santa María de Guadalupe. Y junto a ella, un libro de condolencias que se fue llenando de palabras de elogio.
La mañana transcurrió en un entrar y salir de personas del salón de plenos hasta que, a las 15.30 horas, miembros de la corporación municipal cargaban el féretro hasta la puerta del ayuntamiento. Les relevó entonces la policía local, que cargó el féretro hasta la catedral. Tras ellos, la corporación municipal con el alcalde a la cabeza, los exalcaldes Elia Blanco y José Luis Díaz, familiares y amigos.
Y en la seo, Pizarro, Blanco y Díaz volvieron a depositar la bandera de Plasencia, el bastón de mando y la medalla del alcalde sobre el ataúd, antes de que el obispo presidiera el funeral. Tras él, el féretro fue trasladado al cementerio.
PESAMES Y ELOGIOS Nada más conocerse la noticia de su muerte y durante el día de ayer, se sucedieron los pésames y mensajes. El alcalde destacó que, como alcalde, "puso siempre los intereses de la ciudad por encima de los personales"; promoció la construcción del parador, de la variante sur y la llegada de la UNED y fue "una buena persona, que es el título más importante que se puede tener".
Desde el PSOE, el secretario regional, Guillermo Fernández Vara, escribía en las redes sociales: "Cuando alguien como Cándido Cabrera se nos va, no lo hace un hombre, sino alguien que quiso a Plasencia con toda su alma".
El resto de partidos, la policía local, Placeat, las amas de casa y la banda de música, también le dedicaron elogios. "Su carácter y humanidad le llevaron en muchas de sus actuaciones, desde la Alcaldía de Plasencia y más allá de su cargo político, a estar cerca de las personas".
