El ayuntamiento ha elaborado una nueva ordenanza municipal en defensa de los consumidores y usuarios. El nuevo reglamento lo ha promovido la concejala Raquel Puertas y establece los derechos de los consumidores, además de fijar las competencias municipales en esta materia, entre las que destacan como novedad la potestad de realizar inspecciones de productos.

La edil destacó que el texto se ha elaborado para "proteger los intereses del consumidor" y su objetivo ha sido concretar las competencias del ayuntamiento, de la Oficina Municipal de Información al Consumidor (OMIC) y regular la participación de las asociaciones en el consejo municipal que Puertas quiere crear.

Así, destacan como funciones municipales la de informar, orientar, tramitar las quejas del consumidor y mediar en conflictos, pero también y, como novedad, la de educar a través de la escuela de consumo y controlar e inspeccionar los productos para proteger a los consumidores. En este sentido, el texto recoge que "el personal de consumo podrá visitar todo tipo de establecimientos" y si detecta alguna infracción, levantará un acta que servirá de base a la apertura de un expediente sancionador.