La obra de renovación de la calle Matías Montero ha sacado a la luz una estructura de piedra que podría datar del siglo XVIII o ser incluso anterior a esa fecha. A falta del informe final del arqueólogo, los indicios apuntan a que pudo tratarse de un elemento defensivo de la ciudad o a un muro de contención, e incluso servir para las dos funciones con el paso del tiempo.

Así lo explicó ayer la concejala de Patrimonio, Mónica García, que acudió a la zona junto con la alcaldesa para explicar este descubrimiento que no viene recogido en ningún mapa y del que nada se sabía hasta ahora.

La concejala hizo hincapié en sus dimensiones, ya que se ha excavado hasta 3,80 metros de profundidad y "no se ha llegado a la base de la estructura, pero no podemos excavar más por seguridad", dijo. El ancho oscila entre 1,50 y 1,80 metros.

El siguiente paso será sacar las conclusiones oportunas, aunque, según explicó García, las conclusiones provisionales apuntan a que pudo tener dos funciones. La primera, como elemento defensivo de la ciudad y la segunda, que fuera un muro de contención de tierras de la ronda interior que mandó construir el obispo Laso alrededor de la muralla. También cabe la posibilidad de que tuviera ambos usos, ya que como indicó la concejala, "tiene distintos recrecimientos, el último del siglo XIX y pudo haber servido como elemento defensivo y después, reutilizarse como muro de sujeción". Lo que descarta el arqueólogo es que fuera parte de la muralla fundacional.

Este nuevo hallazgo viene a sumarse a la antigua red de saneamiento descubierta anteriormente con motivo de las obras, que ya conocía el ayuntamiento y que, según desveló ayer García, data del siglo XVI. Ya se ha tapado y lo mismo se hará con el muro encontrado ahora: "Se tapará con todas las garantías para conservarlo", explicó la edila.

COORDINACION Y RAPIDEZ Porque, aunque la obra de la calle no se ha paralizado ahora, sí afecta a la conexión de tuberías. Por eso, la alcaldesa explicó que los técnicos municipales y el arqueólogo deberán ponerse de acuerdo en las medidas de protección para después tapar la zanja abierta.

En este sentido, pidió celeridad: "Pedimos a las administraciones que, en el caso de elementos que provocan frenos de obras, los profesionales se pongan de acuerdo para solucionarlos en el menor tiempo posible", una coordinación que también ha pedido ya la concejala de Urbanismo, Victoria Domínguez.

Junto a esta petición y dado el retraso ocasionado en la obra, Blanco recordó que "tenemos la obligación de investigar el patrimonio, la vida es así y hay que tomarlo con filosofía".