El azar ha querido que algunos de los ocupantes ilegales de viviendas sociales de la Junta hayan salido, por sorteo, representantes de los 106 solicitantes de los pisos vacíos en la comisión municipal que se ha formado esta semana para baremar los expedientes. La asociación de vecinos de Gabriel y Galán lo ha denunciado públicamente y estudia impugnarla con la sospecha de que sea "la puerta de atrás" para la legalización de sus casos.

La propia concejala que ha asumido la difícil tarea de controlar esta situación, Carmen Blázquez, se vio sorprendida por el resultado del sorteo, pero ayer explicó que el decreto de Vivienda de la Junta no impide su presencia en la comisión, "lo que no quiere decir --insistió mucho-- que vayan a obtener una vivienda porque lo que sí dice el decreto es que los ocupantes ilegales no tienen ya derecho a ella".

PROVOCACIONMientras la asociación vecinal lo ve una provocación en un barrio permanentemente en conflicto por este y otros problemas de inseguridad. Así las cosas, la concejala ha solicitado a la Junta la presencia también de sus técnicos para que confirmen con papeles cuantos casos de ocupación ilegal aparezcan en las solicitudes que ya se han empezado a puntuar. La decisión final, no obstante, es de la Junta, como propietaria de los pisos.