El juzgado decretó ayer el ingreso en prisión del llamado ladrón de unifamiliares , que fue detenido por la Policía Nacional, tras ser sorprendido por una niña y su padre de madrugada mientras robaba en su vivienda. La policía lo puso a disposición judicial el martes y lo considera responsable de un total de 11 robos con fuerza en domicilios por el procedimiento del escalo, cometidos en lo que va de año.

Se trata de J. C. G. S., y no de J. J. S. P., como se informó en principio y del que la policía sospecha que también está relacionado con los robos.

La policía ha querido destacar que su detención se ha llevado a cabo después de arduas investigaciones y gracias a la "inestimable colaboración" de su última víctima que, tras escuchar los gritos de su hija, y sorprender al ladrón cuando robaba en su casa, forcejeó con él para retenerle y ayudó a identificarlo a los agentes, que finalmente le detuvieron en San Lázaro, según fuentes policiales.

El ladrón se dedicaba a robar joyas, dinero o electrodomésticos en las casas mientras la familia dormía en otra zona u otra planta.