Los restaurantes no paran de servir comidas y cenas desde una semana antes de Navidad. De empresas, de amigos, de familia...cualquier pretexto es bueno para reunirse por Navidad en torno a la mesa y ¡ay! del grupo que no haya reservado en octubre. Cada vez más gente se apunta al boom de las llamadas comidas de empresa aunque sean del claustro de profesores de un instituto, de un organismo oficial o del hospital.

Señal del overbooking en los restaurantes es que no hay un hueco libre en todo el centro para aparcar y que la plaza Mayor está a rebosar de coches. Los restaurantes consultados coinciden en señalar que la mayor parte de las reservas se hacen a mediados de octubre y que abundan las cenas con una media de 25 comensales. Son las fiestas más culinarias del calendario porque ya no sólo se dan las comilonas en casa y en familia. Es otra forma de relacionarse con los compañeros y de aparcar el trabajo.