Los padres del colegio público Las Eras, en Malpartida, han firmado un escrito por el cual rechazan que sus hijos utilicen el pabellón de gimnasia del centro. La razón es que, tras la última intervención del Gobierno de Extremadura para solventar las goteras que arrastra desde su apertura, "ahora hay goteras y un techo de piezas de aluminio que se caen con un balonazo", explica María del Carmen Serrano, secretaria de la Asociación de Padres y Madres del centro.

Serrano afirma contar con el respaldo "del colegio y de los representantes políticos", y pide una "solución definitiva", tras comprobar que esta obra, que ha mantenido cerrado el pabellón el primer trimestre de este curso y ha costado 57.870 euros, no ha solventado el problema. La Consejería de Educación ha afirmado conocer el hecho, y asegura que esta incidencia "será evaluada por los técnicos".

El colegio nació con polémica. Tras haber abierto en septiembre del 2009, en febrero del año siguiente el Partido Popular regional, entonces en la oposición, exigió que fuera desalojado por no contar con los permisos necesarios, un extremo que el entonces director rechazó. El hecho es que la empresa encargada de su construcción se declaró en concurso de acreedores poco antes del inicio del curso y, como explica Serrano, "no quedó bien de obra principal, había goteras por muchos sitios".

Fue necesario, entonces, una dotación extraordinaria de la Junta para rematar la obra inconclusa, una intervención que ya trató de arreglar los problemas del gimnasio. Sin embargo, el centro requirió una segunda obra. Fue entonces cuando se instaló en el gimnasio un ventilador "para evitar condensaciones, según nos dijeron", y un falso techo de pladur.

Ese techo comenzó a desprenderse el año pasado, razón que provocó la tercera y, por el momento, última obra. "Se han gastado más de 100.000 euros en tres actuaciones, y el resultado es que seguimos sin gimnasio", lamenta Serrano.