A partir del próximo año los proveedores municipales cobrarán en dos meses tan pronto como el ayuntamiento ponga al día las facturas atrasadas porque ahora están cobrando de media en tres o cuatro meses, según dijo ayer el concejal de Hacienda, Pablo Sánchez del Mazo. Este fue un compromiso del concejal desde el principio de legislatura que ayer aseguró que se llevará a efecto a partir de enero porque entonces dispondrán ya de un sistema informático que desplazará al papeleo que "en muchos casos --dijo-- ha hecho que se traspapelen las facturas de tiempo atrás".

Algunas de ellas tanto que el gobierno se ha visto obligado a hacer varios expedientes de reconocimiento extrajudicial de deuda para poder abonar las facturas a los proveedores, que en algunos casos llevan bastante más de cuatro meses esperando.