Al menos 24.172 vehículos circulan por las calles placentinas porque este es el último dato dado a conocer por el ayuntamiento con fecha de junio del 2005, pero en estos meses seguro que ha crecido el número sobre una población que no supera los 40.000 habitantes. Hasta entonces sólo turismos había 16.757, según el impuesto municipal de circulación, lo que sobre un padrón de 39.622 habitantes revela que hay dos coches por familia.

Quizá el dato explique a más de uno la congestión de tráfico que presenta sobre todo el centro, donde las calles estrechas, el doble sentido y los malos usos como aparcar en doble fila entorpecen la circulación. Razones éstas que apunta el propio plan de tráfico encargado por el ayuntamiento a una empresa especializada, cuyas recomendaciones estudian ahora los técnicos municipales, según ha indicado el edil delegado, Blas Raimundo.

El hecho de que Plasencia ha crecido varios kilómetros a lo largo obliga a estos vecinos a coger el coche, pero también es costumbre de la mayoría de los conductores abusar del vehículo y la fisonomía de una ciudad sin grandes avenidas hace el resto. Ni siquiera la circunvalación disuade a los muchos trabajadores del polígono de atravesar la ciudad en horas puntas.