La Policía Nacional busca a un trío sudamericano como sospechoso de haber vuelto a la carga con el robo de la mirilla tras el perpetrado el viernes de nuevo en el edificio de Céntrica frente al supermercado de Carrefour. Así es que ha alertado a los vecinos de la presencia de dos hombres de origen colombiano y una mujer rubia con un llamamiento a que a la menor sospecha o ruidos extraños, avisen inmediatamente con una llamada de teléfono al 091.
Eso habría frustrado uno de los cuatro robos ocurridos esta semana en Obispo don Bricio junto a San Miguel, donde una vecina escuchó ruidos que confundió con los propios de una mudanza y resultó que los ladrones habían forzado dos viviendas en el piso superior al suyo.
Sin embargo, estos y los perpetrados en Obispo Calderón Polo junto a la avenida Donantes de Sangre se realizaron con la técnica rudimentaria de la palanca en la puerta mientras el del viernes en Céntrica lleva la firma de una red colombiana que no merodeaba por la ciudad desde el verano pasado. Su modus operandi es el siguiente: primero llaman al timbre para asegurarse de que no hay nadie en casa y después desmontan la mirilla para introducir por el hueco un espejo que les permite forzar la puerta en el punto exacto donde se encuentra el pasador. Así desvalijaron entonces varios pisos justamente en Céntrica y su entorno, donde la policía pide precaución y colaboración ciudadana en caso de sospecha.
