Ya circula por las calles el radar móvil que se encargará de controlar el exceso de velocidad en todo el casco urbano. Lo anunció ayer la concejala de Seguridad Ciudadana, Josefa Pérez, que advirtió de que las sanciones por superar la velocidad permitida pueden ir de 140 a 300 euros, en el caso de las faltas graves, y de 380 a 540 con retirada del carnet durante un mes, en el caso de las muy graves.

La policía local será la responsable del vehículo, que se apostará en vías como la del Valle, donde durante las pruebas con el radar un coche superó hasta en 50 kilómetros la velocidad permitida.