La policía local intensificará durante este fin de semana los controles de tráfico y de ruido en las vías de acceso a las pistas de verano, según confirmó ayer la concejala de Seguridad Ciudadana, Josefa Pérez.

Con esta medida no sólo se pretende controlar la velocidad y la alcoholemia de los conductores, sino que también se vigilará el nivel de ruidos de estos locales, que ya han provocado muchas quejas vecinales durante el último mes y que llevó a la sanción de cierre de una de estas pistas el pasado fin de semana.

La asociación de vecinos del Rosal de Ayala, una de las más afectadas por el excesivo ruido de los locales de fiesta, han mostrado su satisfacción por las medidas aplicadas durante la pasada semana y han expresado su deseo de que se mantengan.