Lejos de verse en la calle las patrullas conjuntas de las Policías Nacional y Local que la Delegación del Gobierno anunció para final del año pasado como un gran plan de seguridad en el polígono, el centro turístico y los barrios de San Lázaro y La Data, la plantilla de los locales decrece y la de los nacionales permanece inmóvil.

La comisaría de la Policía Nacional está al 68 por ciento con diecinueve plazas vacantes y 41 agentes en la calle de los sesenta que tiene en plantilla mientras la jefatura de la Policía Local ha advertido en una circular interna al concejal de Seguridad, Francisco Corisco, que no garantiza los servicios mínimos policiales en los meses de verano ni en fechas festivas como la Semana Santa o las ferias por "la progresiva disminución de efectivos anuales".

El propio delegado del Gobierno, Oscar Baselga, indicó entonces que las diecinueve vacantes de la Policía Nacional se irán cubriendo en dos o tres años, pero en el caso de la Policía Local, el ayuntamiento no ha sacado este año oferta alguna de plazas y ha amortizado dos de agente y una de oficial por jubilación. Además de que dos turnos están sin oficial al mando.

El informe de la jefatura añade, además, la dispersión de agentes en servicios municipales ajenos a los turnos y el aumento de la especialización como la vigilancia del servicio de la grúa, de obras, de señalización o la Policía Fiscal así como el traslado de un subinspector al departamento municipal de Informática y demás agentes al 112 de emergencias o a Protección Civil.

ROBOS QUE SUBEN Y BAJAN

Así indica que "tal y como están constituidos cuantitativamente los turnos policiales, en caso de establecerse tres periodos vacacionales --del 16 de junio al 16 de septiembre-- se infringirían los mínimos policiales establecidos para el servicio sin poderse tampoco garantizar el correcto desarrollo del mismo". Lo que el alcalde se apresuró a minimizar "porque es el mismo informe de todos los años, pero cuando llega el caso se corrige" sin tener que pagar horas extraordinarias aunque no precisó cómo entonces.

No obstante, en la junta local de seguridad de octubre donde Baselga anunció el plan de seguridad, advirtió que ésta no es una ciudad insegura. Los datos de inicio de año aportados por la Comisaría revelan un descenso del cincuenta por ciento de robos en domicilios con respecto del mismo mes del año anterior, pero un aumento de los robos de vehículos en la vía pública, si bien han reaparecido tan misteriosamente como desaparecieron.