Como consecuencia de los últimos robos cometidos el sábado en el polígono industrial, donde los ladrones entraron en cuatro naves de madrugada, el sector ha reclamado que haya más vigilancia policial. Así se lo pidió, de hecho, ayer a la alcaldesa uno de los afectados, que es, por cierto, el presidente de la Federación Empresarial Placentina (FEP), Pedro Castro.

El modus operandi empleado por los ladrones en el polígono, donde lo primero que hicieron fue desactivar los sistemas de alarma manipulando una torreta de Telefónica, hace pensar a los afectados que no se trata de delincuentes comunes, sino de ladrones profesionales. Lo cierto es que el polígono industrial es una de las zonas con servicio especial de vigilancia, en la que se turnan periódicamente los agentes de la policías local y Nacional.

Por otro lado, vecinos de la avenida Donantes de Sangre se sumaron ayer en el ayuntamiento a las peticiones de mayor vigilancia policial después de conocer que los amigos de lo ajeno han vuelto a entrar en un ultramarinos de la cercana avenida de Cañada Real.