La policía local ha empezado a poner las primeras multas por abandonar en la vía pública los molestos excrementos de perro que son tan habituales y por tomar como urinarios públicos las calles, también muy frecuente sobre todo en la zona de la movida en el centro aunque los primeros multados con 120 euros por orinar en la calle fueron sorprendidos de madrugada esta semana en Miralvalle.

Después de la campaña de concienciación para recoger los excrementos de perro --no hay buzón donde la concejalía de Limpieza y la empresa concesionaria no hayan depositado uno de estos folletos-- la edil, Carmen Blázquez, ha cumplido la advertencia de pasar a las sanciones, también de 120 euros.

También después de un año la policía local ha vuelto a poner multas por sacar la basura a deshora o por abandonarla fuera de los contenedores y cinco vecinos tendrán que pagar 460 euros cada uno, según confirmaron fuentes policiales.