La Asociación de Amigos y Familiares de Proyecto Hombre agradeció ayer públicamente la colaboración económica año tras año de Caja Extremadura con una institución que ha conseguido desenganchar de la droga a un centenar de personas en una década. Su presidente, Jesús Medina, recibió un pergamino enmarcado del nombramiento de socio de honor en señal de gratitud por ser "la puerta que hemos tenido más abierta y la institución que más colabora económicamente", en palabras del vicario Virgilio Vegazo.

"La Caja --resaltó Jesús Domínguez, vicepresidente de la asociación-- puede dormir a gusto porque está haciendo una labor tan social como salvar vidas de enfermos y es que el mejor dinero invertido es el que se da para salvar vidas". Fiel a sus orígenes, la caja de ahorros dedica anualmente algo más de 75.000 euros a paliar el déficit que el mantenimiento de esta obra social supone a las diócesis de Coria-Cáceres y Plasencia y que el último año se cerró con 36.000 euros, 30.000 más que el anterior.

Por contra, hasta quince jóvenes recibieron el alta médica, sesenta empezaron la fase de la comunidad terapéutica en Santa Bárbara y 128 iniciaron el proyecto en la casa de acogida. El presidente de Caja Extremadura elogió el sentido humano y solidario de las diócesis y la asociación de amigos y familiares en una sociedad donde advirtió que el llamado Estado del Bienestar no puede llegar a todas las partes para señalar que sin ellos e instituciones como las cajas de ahorro, obras sociales como ésta no habrían tenido igual repercusión.

De ahí que destacó el acto como otro reencuentro con los fines fundacionales de la caja aunque abogó, con los años, porque "la sociedad se conciencie por hacer más medidas preventivas".