Varios comerciantes y ciudadanos se quejaron ayer por la tarde de la presencia de un gorrilla en la céntrica puerta del Sol, que pedía dinero a quienes aparcaban su coche, a pesar de encontrarse en un espacio con zona azul.

Por eso, los indignados conductores protestaban: "Ya lo que faltaba es que también aquí nos tengan que pedir dinero", decía un comerciante, mientras una clienta pedía: "A ver si el ayuntamiento se pone las pilas y les echa".