De nuevo, la convocatoria del plan de empleo social demuestra la necesidad de trabajo que existe en la ciudad. Porque para las 46 plazas que cubrirá el ayuntamiento con cargo a este plan se han presentado un total de 1.268 solicitudes, teniendo en cuenta que una misma persona puede optar a varias plazas.

Una comisión técnica se encargará ahora de valorar el cumplimiento de los criterios por parte de los aspirantes en base a la documentación entregada. Dado el volumen de solicitudes y, con el objetivo de tener listas las contrataciones en la fecha límite establecida, el 31 de diciembre, esta comisión se ha reforzado con un mayor número de técnicos, que en otras convocatorias han tenido que trabajar mañana y tarde para ajustarse a los tiempos.

No hay por tanto examen en este plan, sino que ocuparán las plazas los que más puntuación obtengan en virtud de una serie de criterios. Son: tener menores ingresos familiares y mayores responsabilidades familiares; ser víctima de violencia de género; discapacidad igual o superior al 33%; miembros de la unidad familiar, sean cónyuges o hijos, con discapacidad igual o superior al 33%; empadronamiento de más de un año en el municipio; condición monoparental que no reciban pensión del otro progenitor; tener hijos menores de edad y el tiempo en situación de desempleo del solicitante.

Una vez baremadas todas las solicitudes, se publicará una lista provisional de admitidos, con el orden de puntuación y entonces, habrá un plazo de dos días hábiles para subsanaciones y reclamaciones.

Pasado este plazo, se estudiarán las que se presenten y se publicará la lista definitiva de admitidos y, con un plazo de un día hábil para formular reclamaciones a la puntuación. Finalmente, se publicará la lista de seleccionados y de reserva.

Según indican las bases, antes de realizar las contrataciones se comprobará que los candidatos están en situación de desempleo, que reúnen los requisitos de la convocatoria y que no hayan trabajado en el ayuntamiento por un periodo determinado.

Los no contratados quedarán en lista de espera para posibles bajas y los contratados, tendrán que pasar un periodo de prueba de dos meses.

El plazo de contratación general será de seis meses y la mayoría de los contratados trabajarán el 100% de la jornada, salvo 11 auxiliares de ayuda a domicilio y un auxiliar administrativo para la Concejalía de Juventud, que trabajarán un 70%.