Los vecinos del entorno del botellón se sienten "totalmente engañados" por el concejal de Interior, Francisco Martín, y critican sobre todo su silencio dos meses después de que se comprometiera con ellos y públicamente a que antes de que terminara el año el traslado del botellón sería una realidad.

Fue el pasado 16 de noviembre cuando el edil citó a la plataforma de vecinos contra el botellón y a la Fepave a una reunión en la que les informó de que había pedido informes de cuatro posibles ubicaciones alternativas al recinto ferial actual y se comprometió a que el traslado se aprobaría en una nueva ordenanza municipal antes de finalizar el año para hacerse efectivo en enero.

Dos meses después, ni la ordenanza pasó por el pleno ni el concejal se ha puesto en contacto con los vecinos para darles una explicación que consideran les debe porque le dieron un voto de confianza.

Hasta ese momento, la plataforma había recogido mil firmas contra la celebración del botellón y se planteaba medidas de protesta, pero las aparcó ante las palabras del concejal. Ahora, la plataforma se muestra indignada "por la falta de palabra de este señor. Ha demostrado que los ciudadanos le importamos un pito".

Por eso, su intención es convocar con urgencia una reunión vecinal para tomar una decisión definitiva sobre las medidas a tomar.